nuestra historia

        Corría el verano de 1977 cuando el matrimonio Schürch llegó con sus cuatro hijos a nuestra querida ciudad de Guadalajara procedentes del norte de Europa.

Soplaban tiempos de cambio y transición en nuestra España tradicional, donde la mentalidad de las familias españolas comenzaba a abrirse influenciadas por las culturas occidentales. Atrás parecían quedar aquellos años de ostracismo en el que sus habitantes parecían haber aprendido a no mirar más allá de las fronteras establecidas y el pueblo comenzaba a abrirse a nuevas oportunidades de futuro.

Es en esta etapa de sueños, ilusiones y proyectos que Alfredo Schürch y su esposa Maya reciben el llamado de venir a nuestro país a predicar la Palabra del Señor, sedientos de ganar almas para Cristo en un país cerrado tradicionalmente al Evangelio más allá del catolicismo romano apostólico.

Es así que desde julio de ese mismo año se pusieron manos a la obra y en tan solo cuatro meses comenzaron a evangelizar a la ciudad de una forma activa, trayendo la luz del Evangelio de Cristo al que poco a poco familias enteras comenzaban a entregarse, de modo que las primeras comunidades cristianas no católicas comenzaban a establecerse en la ciudad.

De esta forma a principios de los 80 se adquiere el local que servirá de iglesia donde los hermanos comienzan a reunirse y a compartir su fe. Dicha iglesia es bautizada con el nombre de “La Roca” en honor al Señor Jesucristo, la Roca de la fe cristiana sobre la que Su pueblo edifica sus vidas.

Años más tarde, y consolidada la comunidad, la familia evangelista Schürch traslada la función pastoral a Ignacio Seisdedos quien se encarga desde 1986 de ejercer el pastorado durante los años siguientes. Es en esta etapa en la que la iglesia se traslada de ubicación a la actual en la calle General Moscardó Guzmán y donde años más tarde se realizará el siguiente relevo pastoral, siendo los pastores Jesús Esteban y su esposa Pilar Sierra los que reciban el encargo de pastorear a la iglesia La Roca antes de la década de los 90.

Bajo su liderazgo, la iglesia comienza a establecer relaciones con otras iglesias a las que se les considera doctrinalmente semejantes, asociándose a la Federación de las Asambleas de Dios en España (FADE) y formando parte activa de la Federación de Iglesias Cristianas de Guadalajara (FEDEGU).

Con el paso de los años, muchas personas y familias enteras son añadidas a la iglesia y ésta comienza a crecer en número y en fe, siendo la iglesia La Roca en la actualidad un lugar donde se congregan numerosos creyentes que ponen al servicio de Dios y Su pueblo los innumerables dones que se les han dado y donde se sigue formando a los hermanos que seguirán contribuyendo a que las Buenas Nuevas del Evangelio de Jesús sigan predicándose al mundo.

Así, y con el anhelo de dar cumplimiento al mandato de Jesús, la Iglesia Evangélica La Roca continua siendo fiel testigo de Cristo en “Jerusalén, Judea y Samaria, y hasta lo último de la tierra”.  (Hechos 1:8)